Estética y sensaciones

LA BASE para que un interiorismo sea bueno es la funcionalidad pero, solo con eso, no es suficiente. Hay que dotar de personalidad y sensaciones al entorno que nos arropa.

Un solo elemento puede definir la estética de un espacio. En este caso se trata de una planta, el bambú. Con connotaciones de fortaleza, constancia y paciencia, se ha aplicado de diversas formas hasta acaparar el protagonismo absoluto de esta cafetería de un forma sutil y, en ocasiones, casi imperceptible pero presente.

Se ha utilizado en el suelo y mobiliario por su dureza, en imágenes en distintos soportes, vidrios, vinilo microperforado y en cajas de luz, para crear una atmósfera relajante y fresca.

Su porte poderoso nos separa del exterior y forma un seto vivo con el lento movimiento de sus hojas.